“Mis hijos, no son corruptos”: AMLO sale en su defensa.

En La Mañanera de este lunes 29 de enero, el presidente Andrés Manuel López Obrador habló sobre los escándalos en los que se han visto involucrados sus hijos mayores por presuntos actos de corrupción. Sin embargo, el mandatario acotó que todo se trata de montajes y que no hay pruebas de que sus hijos hayan participado en lo que se les acusa, “mis hijos no son corruptos”, sentenció AMLO desde Palacio Nacional.

El presidente habló específicamente del caso de Gonzalo ‘Bobby’ López Beltrán, quien es es señalado por haberse involucrado en algunos contratos para el material ocupado en la construcción del Tren Maya, dejando como proveedor a uno de sus amigos, el empresario mexicano Jorge Amílcar Olán Aparicio; dicha información fue revelada a inicios de enero durante el noticiario de Carlos Loret de Mola en Latinus.

El mandatario salió en defensa de su tercer hijo y aseguró que él no tiene nada que ver con la política, “yo tengo tres hijos de mi primera esposa, y de los tres grandes, el que más se cuidaba era Gonzalo, que en la escuela le decían ‘Bobby’, pero es muy difícil que esté en una foto conmigo porque no quería que se le vinculara conmigo. Estudió en la Facultad de Ciencias Políticas y nunca se dieron cuenta que era mi hijo”, aseguró AMLO.

Aunque el reportaje en cuestión es del periodista Mario Gutiérrez Vega, el presidente se enfocó en criticar al conductor Carlos Loret de Mola, a quien tachó de ser especialista en crear montajes frente a las cámaras de los medios de comunicación donde ha trabajado. Como ejemplo, sacó a colación el caso de su ‘brazo derecho’ y encargado de la Ayudantía, Daniel Asaf, a quien en un reportaje reciente en Latinus lo señala como parte importante de una red de negocios y tráfico de influencias donde participan sus hijos.

Recuerda escándalos de José Ramón

AMLO también recordó que hace dos años a su hijo mayor, José Ramón López Beltrán, Latinus y Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, de Claudio X. González, lo exhibió  por supuestamente rentar una lujosa casa en Houston, Estados Unidos, la cual era propiedad del ejecutivo Keith L. Schilling, de Baker Hughes, una de las empresas proveedoras de Petróleos Mexicanos (Pemex), lo que significaba que incurrió en conflicto de interés con el gobierno federal.

Asimismo, explicó que después del escándalo de la llamada ‘casa gris’, la misma asociación civil dio a conocer en 2023 que José Ramón tenía como domicilio una casa en la zona de Copilco-Universidad, al sur de la Ciudad de México, la cual era propiedad de Guillermina Álvarez,  la asistente de Carmen Lira Saade, directora de La Jornada, “el periódico que ha recibido el mayo monto de contratos de publicidad oficial en este sexenio”, dice el reportaje.

En ambos casos, no se ha comprobado que José Ramón incurriera en presuntos actos de corrupción, advirtió nuevamente López Obrador este lunes; vale recordar que a raíz de estos escándalos, el presidente pidió a Loret de Mola que se disculpara, además de que ha arremetido en contra de él en reiteradas ocasiones, tachándolo de crear montajes, ser corrupto y de ganar dinero en los medios por trabajar poco y buscar dañar a su administración.