El inflador de la sucesión presidencial 2024.
El sueño de todo Presidente de la República o Presidente Municipal, es lograr heredar el poder a un familiar o ya aunque sea, a alguien cercano a su persona, en proyecto, intereses o ideas, en el peor de los casos, aunque sea a uno del mismo partido político, pero requiere tener esa sensación que su proyecto no terminará el día que termina su gobierno, ha sido el sueño de todos desde que existe el poder, antes por eso los reyes heredaban a su familia el trono, era la forma de que su legado continuará. La lucha por la democratización ha buscado terminar con esos legados. Durante muchos sexenios, en México, se le caracterizó como una monarquía sexenal hereditaria, en la que un solo partido, repartía el poder. Para bien y para lo que quieran, eso terminó el año 2000, pero quedaron las ganas de que se repita.
Ese mal por supuesto también ataca al actual inquilino de Palacio Nacional, que en diversas ocasiones habla de ceder el bastón de mando, de pasar la estafeta de la Cuarta Transformación, de su legado político, de la continuidad, y en realidad no es nada nuevo, ni será el último que desea hacerlo. Zedillo quiso dejar a Labastida, Fox a Santiago Creel, Calderón quiso dejar a Ernesto Cordero, Peña Nieto a Meade y López Obrador a Claudia Sheinbaum
Y en ese empeño de dejar a Claudia Sheinbaum, López Obrador invierte su resto, su alta popularidad para transferir el bastón de mando, pero los tiempos han cambiado y hace décadas que en México, nadie ha podido dejar a su heredero en el poder, ¿A AMLO le alcanza?, muchos creen que si, las encuestas de su aprobación de gobierno dicen que sí, las encuestas de Morena dicen que sí, pero el camino al cielo tiene otros datos.
Claudia Sheinbaum, será candidata presidencial de Morena, gracias a López Obrador, él fue quien la ha inflado desde que empezaron juntos, el como Presidente y ella como encargada de la Ciudad de México. Se dice que él fue quien infló a Xóchitl Gálvez, para que fuera la candidata opositora y que ya la desinfló, pero hay otros datos, será la candidata del Frente Amplio, no hay vuelta de hoja y los números dicen que ya le complicó el escenario, ante esto ahora está tratando de inflar a Samuel García, para que se lance por Movimiento Ciudadano y logré dividir el voto de sus opositores. Ahí la lleva secundado por Dante Delgado, quien tiene sus propias razones para querer competir solo. Pero en ese arte que le gusta de inflar y desinflar, las cosas ya se le salieron de control al Presidente, y después de que lo que era Va por México, estaba en la lona, ahora es motivo de su ocupación en todas las mañaneras, lo que empezó como una burla, ahora ya es un ataque constante, para con la aguja de su popularidad intentar desinflarlos, aún cree que tiene el control del proceso, no se ha dado cuenta que ya lo perdió, incluso el ritmo del proceso interno de Morena, las denuncias y los gastos excesivos que encueran a las corcholatas, no estaban presupuestados. El Presidente sabe mucho de historia, ya debería saber lo que va a pasar con su sucesora, ni va a poder controlar la elección, ni tampoco podrá controlar a quien le suceda, el aire solo le alcanzó para inflar, pero no para desinflar. Al tiempo