Ahora o nunca

Opinión del Ing. Jorge Luis Bautista.

Con toda la información dada por los capos mexicanos a las autoridades norteamericanas, se abre una oportunidad casi única para depurar de raíz a nuestro putrefacto sistema político, económico y judicial.

Hoy ya se tienen los «pelos de la burra» en las manos, pelos entregados por los propios arrieros, y nuestros vecinos ya tienen el argumento irrefutable para librarnos de todos aquellos que recibieron, directa o indirectamente, dineros o cualquier otro tipo de apoyo para alcanzar su «éxito» como político, o como empresario, esos que hicieron dinero de la nada.

Digo que es una oportunidad única, pues abarca a todos los corruptos del último medio siglo, y justamente en ese periodo se ubican los personajes más rapaces en la historia de nuestra Patria.

Para algunos analistas, Juárez, o Cárdenas, incluso López Mateos o Ruiz Cortines, sí le cumplieron a México, Pero de Díaz Ordaz a la fecha, no hay quién se salve. Por eso, ahí está la única oportunidad de depurar, y aún sabiendo que pueden venir otros igual o peor, bien vale correr el riesgo.

Pero, ¿ Y cómo hacer está depuración o sustitución de los demonios saqueadores y corruptos?. Pues se puede tomar como punto de inicio, revisando que todos los mencionados y señalados por los dedos de los corruptores y envenenadores, tenga un sustento en pruebas irrefutables, para enviarlos a morir en las celdas de EEUU o de el Salvador, con Bukele, como carcelero bien pagado.. O en silla eléctrica o con inyección letal..Que escojan.

Y el segundo paso es volver a interrogar a los » patriotas» forjadores de cárteles, sobre los nombres y dirección de todos aquellos políticos, empresarios o ciudadanos comunes mexicanos, A LOS QUE LES OFRECIERON DINERO Y LO RECHAZARON POR SU COMPROMISO CON SU FAMILIA Y CON SU PATRIA.

Muchos pensamos que no los hay, y ante tanta maldad vista, creemos que ya todos somos corruptos, pero, los demonios, hoy son quizás , los únicos que pueden decir quién no ha aceptado y se resistió a hacerse cornudo. Y esos pueden o deben ser el germen de una nueva clase política emergente.

Reconozco es es muy riesgoso para nuestra sustentabilidad como Nación, el hecho de que otros, de escasa calidad moral nos tengan arrinconados, pero..¿quién más podría hacerlo?, si de adentro todo está podrido.

El riesgo inminente sobre los tres elementos que conforman a una nación, (territorio, población y sus leyes) está ahí. Y en caso de que no suceda nada extraordinario, fuerte y conmovedor, podemos estar seguros que la decadencia continuará hasta que México ya no tenga nada que se le robe..