Las falsas identidades para obtener lugares políticos reservados.
Por José Sandoval
“De tez blanca y ojos claros, Julia Arcelia Olguín Serna, diputada electa por Zacatecas, fue otra de las postuladas por una acción afirmativa: persona afrodescendiente. El tono rubio que actualmente utiliza, cubre la cabellera castaña que ha mostrado en otros momentos de una trayectoria pública, que incluye cargos como coordinadora de Giras, Logística y Ayudantía del gobierno de su estado y directora de Transporte Público y Vialidad, así como una inhabilitación por diez años por presunto peculado”.1
Julia Arcelia Olguín, es muy cercana al gobernador de Zacatecas, David Monreal, fue candidata común de Morena, PT y PVEM, presentó una “carta de autoadscripción” que la autoridad electoral validó sin problema.
“En México las personas afrodescendientes son las descendientes de mujeres y hombres africanos que llegaron a la Nueva España –en su mayoría– como personas esclavizadas, especialmente en los siglos XVI y XIX. Fueron traídas de manera forzada, extraídas de sus comunidades y de sus familias principalmente en Gambia, Senegal, Congo, Angola y Mozambique. Históricamente, han sido invisibilizadas y sufrido discriminación, racismo y violencia.”2
Olguín, ganó la elección, es una de las diputadas que el PVEM le acaba de “prestar” a Morena para que Presida la Cámara de Diputados durante los 3 años. Ella no es la única, Gerardo Olivares, es diputado federal electo por la región de la montaña de Guerrero sin ser indígena, que es lo que se supone ordenó el INE.
El INE y los organismos electorales locales, estipulan cuotas indígenas, de discapacidad, de juventud, de género, de la comunidad lésbico gay, de la comunidad afroamericana, y en su gran mayoría todas son violentadas por los partidos, colocando a personas totalmente alejadas de dicha pertenencia, coloca a políticos que tiene años compitiendo y solo realizan un documento en que el que se reconocen y una carta comprada a alguna comunidad y listo.
Aquí en Hidalgo, el diputado saliente Francisco Berganza, llegó en el primer lugar de la lista de diputados plurinominales de Morena, hace 3 años, al argumentar una supuesta discapacidad, que nadie identifica; fue muy sonado el caso de Alejandro González Murillo, quien no llegó, pero que también utilizó ese argumento para colocarse como primer lugar de la lista plurinominal, de su partido, el PES (Encuentro Social), sin que nadie pudiera ver su supuesta discapacidad. En Hidalgo, nuevamente, ahora un panista será diputado federal, para cubrir la cuota indígena plurinominal, con una carta de una comunidad con mayoría mestiza, pero que además es proveniente de un municipio que no es considerado indígena, el mismo jamás ha realizado nada en pro de los derechos de este grupo étnico.
El INE impone cuotas, y se burla de las personas, al aceptar que “le vean la cara” colocando a personas que no cumplen con el perfil, están documentados los casos de hombres que se están haciendo pasar por mujeres o por ser de la comunidad lésbico gay, sin serlo. El tema de los indígenas y afro descendientes es todavía peor. Se cuentan por decenas los políticos que ocupan esas cuotas y que obviamente no lo son, ni de cerca. Es una burla del INE y de los partidos, adoptar estos acuerdos que ellos mismo se encargan de violentar.
Una opción sería desaparecer estas falsas cuotas inclusivas y la otra es que partidos y autoridades electorales, se encarguen de que certificar por todos los ángulos posibles, que las representaciones sean reales y no burdas simulaciones para justificar una política inclusiva que no existe.
1 y 2.- Axel Chávez, en reportaje de Revista Emeequis.