Los porros de Morena: Dino Madrid
Por César Peña Sánchez.
La prianización de Morena está siguiendo una trama tan lineal que no ha olvidado reproducir el mismo sistema de defensores a ultranza, sus ideólogos que con baja calidad moral, pero con mucha labia y espacios de difusión, sirven para legitimar el status quo con argumentos falaces y hasta legaloides de cosas que ni ellos mismos practican.
Un ejemplo de ello en Hidalgo es Enedino Sánchez Madrid o Dino Madrid, un colaborador de la Presidencia de Morena Hidalgo, que ha pasado a ser el vivo ejemplo de la falta de autocrítica en Morena, entregado a ser una foca aplaudidora del régimen y que carece de toda formación izquierdista referencial, ya ni decir, marxista, pero que cree que está a un alto nivel para debatir cualquier tema que cuestione al morenismo.
El mismo se ha reducido a ser un porro de la pluma, que carente de ética alguna, utiliza su espacio en La Jornada Hidalgo para combatir a los “enemigos” del régimen lo mismo que las redes sociales, para atacar a medios y periodistas que exhiban las corruptelas y documenten los excesos de los funcionarios federales, estatales o municipales de Morena.
En materia de comunicación, el panameño que hizo innumerables negocios con los gobiernos de Francisco Olvera y Omar Fayad, como lo documentó el Nuevo Gráfico, cree tener calidad moral para cuestionar a los periodistas que ponen en duda a la Cuarta Transformación, cuando carece totalmente de ella.
Sánchez Madrid es dueño y prestanombres de diversos pasquines y páginas de internet por las cuales cobra millonarias cantidades en las presidencias municipales en manos de Morena y en la misma Dirección de Comunicación Social del Gobierno Estatal donde la etapa del corrupto Eduardo Iturbe amarró contratos que le impiden lanzar cualquier crítica a la administración estatal.
Pese a que el propio Iturbe salió del cargo por los moches de casi 110 millones de pesos, Madrid jamás lo ha criticado en sus columnas y medios como tampoco lo ha hecho con la Ley Chayote que serviría para democratizar la entrega de recursos públicos de esa oficina a los medios de comunicación. No lo hace por obvias razones.
Prefiere, en cambio, cuestionar a los mensajeros de las noticias, es decir a los comunicadores que las divulgan sin decir por qué razón diversos periodistas no son apoyados como él, por la oficina de Comunicación Social que hoy dirige Edmundo Pineda, queriendo derribar con eso el contenido y erigiéndose como abogado de los malos gobiernos y los peores funcionarios.
Además, cada que aparece en las redes Madrid como “comentócrata”, aparecen con él infinidad de bots que repiten a coro sus dichos, por lo que no es necesario ser muy hábil para darse cuenta que opera una granja de bots para Morena y sus causas. Otro punto en contra de quien aspira a ser un intelectual del régimen.
En este paralelo con el PRI, Morena no ha cultivado a intelectuales reales porque los que estaban en favor suyo, se han ido saliendo precisamente por los desatinos y errores institucionales y omisiones. Su lugar está siendo ocupado por golpistas y acomodaticios que creen que la zalamería escrita les servirá para sostenerse un tiempo, aunque como a diferencia del instituto creado por Plutarco Elías Calles, no durarán más que un par de años más.
- Escritor, periodista, economista y divulgador de la ciencia.
